La palabra es...

______________________________________________

domingo, 17 de octubre de 2010

Mi callada manera de amar

Por: Roberto Manuel Burgos

En calladas frases que ni solitario expreso, me siento enamorado,
enamorado total, perdido y casi confundido en insipientes sueños,
sueños que ciertamente me sacan de balance con la realidad,
ilusiones nocturnas que vuelven mi vida una total pesadilla,
esperando de cada día, nada increíble y tan sólo seguir,
seguir esperando la noche, a la luna y el momento para dormir,
esperar a la luna y que se oculte el sol para soñar mi feliz vivir.

Hoy te llevo, mi amada Angélica, en un falso recuerdo,
en el momento donde tus rubios cabellos me acompañan,
en donde tus claros ojos son como ventanas al cielo,
ese cielo donde cada día veo volar aves y a las bellas mariposas,
donde las nubes son algodones de azúcar y la lluvia,
la lluvia que emana de esas nubes,
solamente es el líquido que puede saciar mi sed.

Recuerdo tu voz, canto para mis oídos, posando angelical como tu nombre,
sobre mi pensamiento, me lleva a pensar
desde que momento pasaste de ser mi mejor amiga,
y te volviste mi ilusión, mi aspirado amor, un amor platónico.

He sido tu fiel amigo, incondicional y a su vez,
esperando el momento oportuno,
escuchándote mi querida amiga, amada de hace cierto tiempo,
escuchando tus lamentos y secando tus lágrimas, que a su vez,
son el sagrado líquido que emana de esas nubes de azúcar y me da vida,
creyendo en la esperanza que entre más infeliz tú, más oportunidad tengo yo.


Soy el mismo, el mismo que te acepta melancólica en tus noches de llanto,
y en tus días de enojo por tu menstrual retraso,
el mismo que vive a la vez, esperando el momento oportuno,
imaginando declarar, de los días que pasan, en día alguno.

Es como he aprendido a amar y de verdad me causa asco,
esperar que sufras y entrar yo, como alivio a tu sufrimiento,
esperar a que recibas el veneno, para ser yo el antídoto al veneno,
y ese será el oportuno momento, donde por fin declarare este sentimiento.

Aunque cierto es que no será del todo malo si correspondido soy con tu amor,
he aprendido a conocerte, saber que te gusta vivir, amar y ser amada,
que eres vegetariana y te encanta el helado de chocolate con mermelada,
que prefieres el verano al invierno, porque odias el frío y prefieres el calor.
También sé cual fecha es la de tu cumpleaños y que deseas casarte a los 32 años,
que te gusta el color blanco más que el negro, siendo tu favorito el morado,
que te fascina el canto y odias el sabor del amaranto,
que prefieres ser sincera por más grande que pueda ser la condena,
ya que tu odias la mentira como tampoco te gusta comer demasiada harina,
sé que te agrada que te hablen con cortesía y que de noche disfrutas mas la poesía.

Te gustan tantas y tantas cosas, así como el matutino olor a rosas
que emana del balcón, donde algún día esperas, de quien estés enamorada,
una bella serenata con mariachi que sea por tu romeo interpretada.
Una esperanza en mi alma crece, y me pone a pensar,
que ciertamente nada pierdo con intentarlo,
decirte mi amada de años, que yo soy el hombre que anhelas,
decirte mi tierna princesa, que soy yo tu príncipe azul,
cantarte mi fértil sirena, al oído mil canciones de amor, las más bellas,
y recitarte las más bellas poesías de amor.

Regalarte rosas, las que tanto te agradan y llevarte serenata,
una bella serenata, tal vez desafinada pero por este tu romeo interpretada,
y por sobre todo, darte mi corazón, total y sincero,
mi total amor incondicional, sea en verano tanto como en invierno.

Por lo pronto el día se ha ido y la noche está cayendo,
ya viene, se acerca, poco a poco me siento de la luna preso,
sólo espero, me sea pronto el oportuno momento,
vivir con tu amor en la realidad, sin que sea un insípido sueño
y donde en la mañana, al momento de despertar
no sea una triste y vacía ilusión, un sueño que termina sin culminar.

0 comentarios: